El verano no da tregua y todos lo sabemos bien. Salimos de la oficina o de una visita a cliente, nos acercamos al coche… y parece que nos metemos en un horno. Esa sensación de calor sofocante al entrar en un vehículo aparcado al sol es algo que casi todos hemos sufrido más de una vez. Por eso, hemos querido recopilar algunos trucos sencillos y útiles para esos días en los que el sol aprieta sin piedad.
Aquí van algunos consejos prácticos que puedes poner en marcha fácilmente y que te ayudarán a refrescar el interior del coche más rápido, incluso si no puedes contar con aire acondicionado o prefieres no usarlo.
1. Busca sombra (si es posible)
Puede sonar a obviedad, pero a veces aparcamos rápido y no lo pensamos. Si puedes, deja el coche bajo un árbol, una pared que proyecte sombra o en un sitio más resguardado. También puedes dejar el maletero hacia el sol, mejor que el parabrisas: es menos vidrio, menos calor directo.
2. El clásico: parasol (y no sólo delante)
Un parasol delantero ayuda bastante, sobre todo si lo combinas con otro en la parte trasera. No evitarás el calor, pero al menos protegerás el volante, los cinturones y la palanca de cambios para que no te quemen al tocarlos.
3. Truco rápido para ventilar el coche
Si no te queda otra que ponerte en marcha con el coche al rojo vivo, prueba este método clásico:
- Abre completamente una ventanilla (por ejemplo, la del copiloto).
- Abre y cierra varias veces la puerta contraria (la del conductor), con firmeza pero sin forzar.
- Repite este gesto unas 4-5 veces.
Parece una tontería, pero ayuda a expulsar el aire caliente y renovar el interior antes incluso de arrancar.
Si tienes a alguien contigo, mucho mejor: ¡doble puerta, doble efecto!
4. Un poco de ayuda extra (casera y eficaz)
Si eres de los que no usan el aire acondicionado o simplemente el coche no lo tiene, aquí van otras ideas caseras:
- Toallas húmedas sobre las rejillas del aire: ayudan a refrescar el aire que entra.
- Bolsas de hielo bien cerradas en el suelo del coche: para trayectos cortos, refrescan el ambiente.
- Cubre-asientos o fundas blancas: evitan que los asientos acumulen tanto calor.
Y si te va lo “MacGyver”, puedes probar esto:
- Corta una botella de plástico por la mitad y colócala en una ventanilla ligeramente bajada, con la boquilla hacia dentro. Al conducir, el aire se canaliza y entra más frío gracias al efecto Venturi (sí, funciona).
¿Tienes más trucos?
¿Tienes algún otro método infalible para combatir el calor dentro del coche? ¿Eres más de abrir ventanillas y aguantar el vendaval o de poner el A/C al máximo y que sea lo que Dios quiera? ¡Compártelo con nosotros!