Conoce a: Angélica Ausín

Nos gusta pensar en nuestra Newsletter como un puente que conecta a los diferentes miembros de Alquiber, sorteando los kilómetros que nos separan y las diferencias existentes entre las responsabilidades que exige uno u otro puesto. Es por ello que, siempre que tenemos la oportunidad, nos gusta crear artículos que os ayuden a conocer a nuestros compañeros bajo el título de personas, y no únicamente como profesionales.

Siendo fieles a este propósito, hemos decidido dedicar este artículo a una de nuestras compañeras más recientes con el fin de contribuir a que su adaptación a la compañía sea lo más agradable posible. Su nombre es Angélica Ausín, nuestra compañera de Recursos Humanos, y es una auténtica friki del deporte.

La primera toma de contacto de Angélica con el deporte se produjo cuando ella tenía escasos tres años. A esta edad, Angélica comenzó a practicar judo y fútbol. A pesar de que nuestra compañera tomó la decisión de abandonar esta primera actividad una vez consiguió su cinturón marrón, Angélica continúa jugando al fútbol a día de hoy, veintisiete años después. Actualmente, es miembro de dos equipos de fútbol 7 en Madrid Río, aunque admite haber jugado previamente en ligas de fútbol Sala, así como en fútbol 11.

No obstante, el desmedido interés de nuestra compañera por las actividades deportivas no se detiene aquí, sino que, con el transcurso de los años, Angélica ha invertido su tiempo y esfuerzo en crecer dentro de otras disciplinas como el senderismo, la escalada, el Trail running y el crossfit.

Desde que comenzó a practicar crossfit hace un par de años, Angélica ha trabajado duro por perfeccionar su técnica, así como por probar ejercicios nuevos con los que mantenerse motivada y que aborda de forma completamente autodidacta. Para ella no existe nada más satisfactorio que contemplar su propio progreso mes a mes, ya sea intensificando la calidad de los ejercicios que lleva a cabo o sumando kilos cada vez que se sube a una báscula.

Sin embargo, nuestra compañera admite que, si tuviese que elegir una única disciplina con la que trabajar el resto de su vida, esa sería el Trail running. Para ella, no existe nada en el mundo equiparable a la descarga de adrenalina que produce llegar a la cima tras haber superado una ruta complicada. A día de hoy, Angélica ha realizado rutas en diferentes zonas de Madrid, Barcelona, Toledo, Galicia y Santander, algunas de las cuales han llegado a alcanzar los 30 kilómetros de recorrido.

No obstante, los sinuosos caminos de la montaña esconden múltiples obstáculos y complicaciones, sobre todo cuando cae la noche. Así nos lo cuenta nuestra compañera cuando, en una ocasión, casi se vio obligada a llamar a los bomberos tras perderse en el Parque Natural de Montserrat (Barcelona) junto con un grupo de amigos. Angélica nos explica como, tras subir a lo alto de una roca haciendo escalada, ella y sus compañeros advirtieron que ya no existía ningún camino transitable en la cima. Ante la incapacidad de retroceder sobre sus pasos porque el camino de vuelta era prácticamente vertical, los protagonistas de esta historia se vieron absolutamente atrapados en la frondosidad del bosque.  Después de varias horas pidiendo auxilio y, con la inminente caída de la noche pisándoles los talones, nuestra compañera estuvo a punto de resignarse y llamar a los bomberos. Pero, en el momento menos esperado, escucharon los gritos de un hombre en la lejanía. Finalmente, guiados por el sonido de su voz, Angélica y sus amigos lograron encontrar un sendero transitable y regresaron al punto de partida.

Actualmente, además de trabajar en Alquiber, Angélica también se dedica a entrenar personalmente a diferentes personas que acuden a ella buscando un cambio en su vida. Nuestra compañera nos comenta entusiasmada que no existe nada más gratificante que apreciar cómo las personas a las que entrena, después de mucho trabajo y constancia, alcanzan sus objetivos. Y, quién sabe, quizás después de este artículo encuentre a algún candidato más a quien encarrilar.