Conoce a: Carla Buezo.

Conceder a las mujeres la notoriedad y el reconocimiento que se merecen, ofrecerles un espacio público donde sean escuchadas, comprendidas, refutadas y admiradas, son algunos ejercicios que deberían ser implementados día tras día. Si, además, consideramos que en marzo tiene lugar la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, esta necesidad se vuelve aún más patente durante este periodo. Es por ello que, en esta edición de la Newsletter, hemos decidido dedicar uno de nuestros artículos a una compañera que destaca por ser una gran apasionada de una disciplina que, convencional y equívocamente, se ha encontrado asociada a la figura del hombre. Ella es Carla Buezo, nuestra compañera de IT, cuyo entusiasmo por las motos inició a muy temprana edad.

Carla tenía 10 años cuando su padre le regaló su primera moto. Se trataba de una Bajaj Sunny amarilla, un modelo de scooter producido en India. Nuestra compañera recuerda con afecto sus primeras travesías por el campo, montada en su pequeña moto y acompañada por varias amigas que ocupaban la parte trasera.

A partir de este momento, el interés que Carla ha sentido hacia el universo de las motos no ha hecho otra cosa que incrementar. A pesar de que se ha servido de este vehículo como medio de desplazamiento en repetidas ocasiones a lo largo de los años (recuerda, entre risas, aquel periodo de su vida en el que fue repartidora de pizzas), no fue hasta hace unos meses cuando nuestra compañera se aventuró a sacarse el permiso de conducir A, el cual le autorizaba a conducir por carretera con motocicletas de gran potencia y tamaño. Carla define su primer trayecto en carretera con una motocicleta de esta índole como una experiencia extremadamente liberadora, similar a la de estar volando.

Hoy en día, nuestra compañera comparte esta gran pasión con su pareja, junto a la cual practica algunas disciplinas cercanas al motociclismo deportivo. Una de sus actividades favoritas es, sin lugar a duda, realizar circuitos con pit bikes. Para las personas a las que esto del motociclismo nos ha pillado un poco distraídos, una pit bike es una moto de tamaño pequeño que se utiliza dentro de circuitos muy reducidos, en un recorrido similar a los circuitos de karts. Carla afirma, entre risas, que en estos recorridos es muy sencillo caerse en numerosas ocasiones, pero que el reducido tamaño de la moto, así como la escasa velocidad, impiden que te hagas mucho daño.

Para Carla, una de las experiencias más enriquecedoras practicando esta disciplina fue la primera ocasión en la que pudo meterse en un circuito. En los cursos de iniciación a las pit bikes, antes de poder dar este paso, es necesario practicar durante varios meses a través de una serie de ejercicios e itinerarios conocidos como los “ochos” o la “serpiente”. Para nuestra compañera, tener finalmente la oportunidad de subir este escalón supuso un motivo de orgullo y satisfacción personal, muestra de que todo su trabajo y esfuerzo habían valido la pena.

No obstante, no es oro todo lo que reluce, y nuestra compañera también admite que la desmedida pasión que siente hacia esta actividad le ha costado algún que otro disgusto. Prueba de ello la constituye su primera experiencia con las motos de trail, motocicletas de un tamaño considerablemente superior a las pit bikes. En este sentido,en un curso de iniciación para manejar las motos de trail a través del campo, Carla sufrió tres caídas en las que todo el peso de la moto cayó sobre su pie izquierdo. A pesar de que sentía molestias, nuestra compañera, decidida y testaruda, se equipó con una bota dura similar a una escayola y finalizó su ruta por el campo. A los pocos días, se enteró de que tenía el pie roto.

En la actualidad, Carla admite que, desde que vendió su motocicleta personal, se ha distanciado relativamente de este universo que tanto la había entusiasmado. No obstante, sabe que pronto volverá a deslizarse sobre dos ruedas por una carretera, puesto que las motos han constituido y  siempre constituirán una parte inherente de sí misma. Y, nosotros, nos alegramos mucho de que así sea.