El pasado 18 de octubre, Alquiber, en colaboración con Fundación A La Par Y Alkora, realizaron por segunda vez la iniciativa solidaria de Responsabilidad Social Corporativa llamada “Cuando hace falta moverse”. Este proyecto reunió a 12 chicos y chicas con discapacidad intelectual y a representantes de Alquiber para recorrer 60 kilómetros de la ruta Xacobea del Camino de Santiago. El objetivo del viaje estaba claro: lanzar al cielo de Santiago más de 200 globos con mensajes y deseos de otros compañeros de la fundación que, por diferentes razones, no pudieron acompañarlos. Esta iniciativa generó visibilidad y concienció a la sociedad de las necesidades de las personas con discapacidad intelectual.
Alquiber proporcionó, además, apoyo continuo de movilidad y logística con dos furgones para facilitar todo aquello que los peregrinos pudieran necesitar y ayudarles a cumplir su misión.
El martes 18 comenzó el viaje con la compañía de la saltadora de altura Ruth Beitia, única atleta española en conseguir el oro olímpico, el atleta paralímpico Dionibel Rodríguez e Ignacio Tremiño, director de Atención a Personas con Discapacidad de la Consejería de Familia, Juventud y Política Social de la Comunidad de Madrid.



El camino estuvo marcado por las lluvias y el viento, lo que dificultó bastante su llegada a Santiago. Pero los chichos pusieron todas sus ganas, ilusión y esfuerzo para conseguir su objetivo. El viaje estuvo dividido en 3 etapas: la primera etapa que recorrieron fue de Melide a Arzúa, la segunda de Arzúa a O Pedrouzo y la última de O Pedrouzo al destino final, Santiago. La llegada a la Plaza del Obradorio estuvo llena de emociones y alegría. Los niños demostraron que, a pesar de sus dificultades, son capaces de conseguir todo lo que se propongan.



Esta acción terminó con la recepción por parte del Ayuntamiento de Santiago que dieron la enhorabuena a pequeños peregrinos por todo el esfuerzo realizado. Tanto la Televisión Gallega, así como Televisión Española y prensa de la zona, quisieron hacer eco del éxito de nuestra peregrinación

Estos 12 niños nos dieron una gran lección y nos enseñaron a disfrutar de los pequeños detalles y momentos.